Ellos le respondieron: —No, señor nuestro. Tus siervos hemos venido para comprar alimentos.
¡No, señor! respondieron. Sus siervos hemos venido a comprar alimento.
Ellos se defendieron: —¡De ninguna manera, señor! Nosotros estamos para servirle, y sólo hemos venido a comprar trigo.
Dijéronle: «No, señor, sino que tus siervos han venido a proveerse de víveres.
Ellos le respondieron: No, señor nuestro, sino que tus siervos han venido a comprar alimentos.
Y ellos le respondieron: No, señor mío: mas tus siervos han venido a comprar alimentos.