El que ha desechado la ley de Moisés ha de morir sin compasión por el testimonio de dos o tres testigos.
Cualquiera que rechazaba la ley de Moisés moría irremediablemente por el testimonio de dos o tres testigos.
Si en un juicio dos testigos afirman que alguien ha desobedecido la ley de Moisés, los jueces no le tienen compasión a esa persona y ordenan su muerte.
Si alguno viola la Ley de Moisés es = condenado a muerte = sin compasión, = por la declaración de dos o tres testigos. =
El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente.
El que menospreciare la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere sin ninguna misericordia.