Los nativos nos trataron con no poca amabilidad, pues nos recibieron a todos y encendieron un fuego a causa de la lluvia que caía, y del frío.
Los isleños nos trataron con toda clase de atenciones. Encendieron una fogata y nos invitaron a acercarnos, porque estaba lloviendo y hacía frío.
Los habitantes de la isla nos trataron muy bien, y encendieron un fuego para que nos calentáramos, porque estaba lloviendo y hacía mucho frío.
Los nativos nos mostraron una humanidad poco común; encendieron una hoguera a causa de la lluvia que caía y del frío, y nos acogieron a todos.
Y los naturales nos trataron con no poca humanidad; porque encendiendo un fuego, nos recibieron a todos, a causa de la lluvia que caía, y del frío.
Y los bárbaros nos mostraron no poca humanidad; porque, encendieron un fuego, y nos recibieron a todos, a causa de la lluvia que caía, y del frío.