Un día subían Pedro y Juan al templo a las tres de la tarde,* que es la hora de la oración.
Un día, como a las tres de la tarde, Pedro y Juan fueron al templo. A esa hora los judíos acostumbraban orar.
Pedro y Juan subían al Templo para la oración de la hora nona.
Pedro y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración.
Y PEDRO y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración.