Los hombres que iban con Saulo habían quedado de pie, enmudecidos. A la verdad, oían la voz, pero no veían a nadie.
Los hombres que viajaban con Saulo se detuvieron atónitos, porque oían la voz pero no veían a nadie.
Los hombres que iban con Saulo se quedaron muy asustados, pues oyeron la voz, pero no vieron a nadie.
Los hombres que iban con él se habían detenido mudos de espanto; oían la voz, pero no veían a nadie.
Y los hombres que iban con Saulo se pararon atónitos, oyendo a la verdad la voz, mas sin ver a nadie.
Y los hombres que iban con Saulo, se pararon atónitos, oyendo a la verdad la voz, mas no viendo a nadie.