¿Acaso le ha herido a la manera del que lo hirió? ¿Acaso ha sido muerto a la manera de los que lo mataron?
¿Acaso el Señor lo ha golpeado como hizo con quien lo golpeaba? ¿Acaso le dio muerte como hizo con quienes lo mataron?
Dios no ha castigado a Israel como castigó a sus enemigos; es verdad que los castigó expulsándolos de su país y mandándolos a tierras lejanas, pero no los destruyó como destruyó a sus asesinos.
¿Acaso le ha herido como hirió a quien le hería? ¿ha sido muerto él como fueron muertos sus matadores?
¿Acaso ha sido herido como quien lo hirió, o ha sido muerto como los que lo mataron?
¿Acaso lo ha herido, como él hirió a quien lo hirió? ¿O ha sido muerto como los que lo mataron?