'¿Con quién, entonces, me compararán ustedes? ¿Quién es igual a mí?', dice el *Santo.
»Nuestro santo Dios afirma: “Con nadie me pueden comparar. Nadie puede igualarse a mí”».
¿Con quién me asemejaréis y seré igualado?, dice el Santo.
¿A qué, pues, me haréis semejante o me compararéis? dice el Santo.
¿A quién, pues, me haréis semejante o me haréis igual? dice el Santo.