Pues ha dicho: 'Ciertamente ellos son mi pueblo, hijos que no mienten.' Y él fue su Salvador.
Declaró: 'Verdaderamente son mi pueblo, hijos que no me engañarán.'
»Dios había dicho: “Ellos son mi pueblo, son mis hijos fieles”. »Por eso Dios los salvó de todos sus males.
Dijo él: «De cierto que ellos son mi pueblo, hijos que no engañarán.» Y fue él su Salvador
Porque dijo: Ciertamente mi pueblo son, hijos que no mienten; y fue su Salvador.
Porque dijo: Ciertamente mi pueblo son, hijos que no mienten; y fue su Salvador.