Para los profetas: Mi corazón está quebrantado dentro de mí; todos mis huesos tiemblan. Estoy como un hombre ebrio y como un hombre dominado por el vino, a causa de Jehovah y a causa de sus santas palabras.
En cuanto a los profetas: y se me estremecen los huesos. y de sus santas palabras, hasta parezco un borracho, alguien dominado por el vino.
Yo, Jeremías, les advierto a los profetas: «Dios me dio un mensaje especial. Por eso siento un dolor profundo y me tiembla todo el cuerpo; ¡hasta parezco un borracho a punto de caerse!
A los profetas. Se me partió el corazón en mis adentros, estremeciéronse todos mis huesos, me quedé como un borracho, como aquél a quien le domina el vino, por causa de Yahveh, por causa de sus santas palabras.
A causa de los profetas mi corazón está quebrantado dentro de mí, todos mis huesos tiemblan; estoy como un ebrio, y como hombre a quien dominó el vino, delante de Jehová, y delante de sus santas palabras.
A causa de los profetas mi corazón está quebrantado en medio de mí, todos mis huesos tiemblan; estuve como hombre borracho, y como hombre a quien dominó el vino, delante de Jehová y delante de las palabras de su santidad.