No entese su arco el arquero, ni toque su cota de malla. No perdonaréis la vida a sus jóvenes. ¡Destruid por completo todo su ejército!
Que no tense el arquero su arco,[2] ni se vista la coraza. No perdonen a sus jóvenes; *destruyan a su ejército por completo.
»Los soldados babilonios ya están preparando sus armas, pero ustedes ni siquiera deben dejar que se pongan la armadura. Al contrario, ¡maten a sus jóvenes!, ¡quítenles la vida a sus soldados!
El arquero que no aseste su arco, ni se jacte de su cota. No tengáis piedad para sus jóvenes escogidos: dad al anatema todo su ejército.
Diré al flechero que entesa su arco, y al que se enorgullece de su coraza: No perdonéis a sus jóvenes, destruid todo su ejército.
Diré al flechero que entesa su arco, y al que se pone orgulloso con su loriga: No perdonéis a sus jóvenes, destruid todo su ejército.