Si soy culpable, ¡ay de mí! Pero aun siendo justo, no levanto mi cabeza, pues estoy harto de ignominia y de ver mi aflicción.
Si soy culpable, ¡ay de mí! Si soy inocente, no puedo dar la cara. ¡Lleno estoy de vergüenza, y consciente de mi aflicción!
Pero, inocente o culpable, estoy en un gran problema y no puedo mirarte a los ojos. ¡Estoy muy avergonzado y me muero de tristeza!
Si soy culpable, ¡desgraciado de mí! y si soy inocente, no levanto la cabeza, ¡yo saturado de ignominia, borracho de aflicción!
Si fuere malo, ¡ay de mí! /nY si fuere justo, no levantaré mi cabeza, /nEstando hastiado de deshonra, y de verme afligido.
Si fuere malo, ¡ay de mí! Y si fuere justo, no levantaré mi cabeza, estoy lleno de ignominia, por tanto, mira tú mi aflicción.