'Aquí no está', dice el océano; 'Aquí tampoco', responde el mar.
Tampoco se encuentra en las profundidades del mar.
Dice el Abismo: «No está en mí», y el Mar: «No está conmigo.»
El abismo dice: No está en mí; /nY el mar dijo: Ni conmigo.
El abismo dice: No está en mí: Y la mar dijo: Ni conmigo.