Al ver los tres amigos de Job que éste se consideraba un hombre recto, dejaron de responderle.
Cuando los tres amigos se dieron cuenta de que Job creía ser inocente, dejaron de responderle.
Aquellos tres hombres dejaron de replicar a Job, porque se tenía por justo.
Cesaron estos tres varones de responder a Job, por cuanto él era justo a sus propios ojos.
Y CESARON estos tres varones de responder a Job, por cuanto él era justo en sus propios ojos.