El no hace distinción de los príncipes, ni favorece al rico ante el pobre, pues todos son obra de sus manos.
Dios no se muestra parcial con los príncipes ni favorece a los ricos más que a los pobres. ¡Unos y otros son obra de sus manos!
Dios nos hizo a todos, seamos pobres o ricos; él no tiene favoritos.
que no hace acepción de príncipes, ni prefiere al grande sobre el débil, ¡pues todos son obra de sus manos!
¿Cuánto menos a aquel que no hace acepción de personas de príncipes. /nNi respeta más al rico que al pobre, /nPorque todos son obra de sus manos?
¿Cuánto menos a aquel que no hace acepción de personas de príncipes, ni el rico es de él más respetado que el pobre? Porque todos son obras de sus manos.