Cuídate de no dejarte seducir por las riquezas; no te dejes desviar por el soborno.
¡Así que mucho cuidado! No te dejes engañar por las riquezas, mucho menos si son mal ganadas,
Procura, pues, que no te seduzca la abundancia, ni el copioso soborno te extravíe.
Por lo cual teme, no sea que en su ira te quite con golpe, /nEl cual no puedas apartar de ti con gran rescate.
Por lo cual teme que en su ira no te quite con golpe, el cual no puedas apartar de ti con gran rescate.