Si llegas a ponerle la mano encima, ¡jamás te olvidarás de esa batalla, y no querrás repetir la experiencia!
Si quieres sujetarlo, acabarás peleando con él, y te arrepentirás de hacerlo.
Están apretados uno a otro, y ni un soplo puede pasar entre ellos.
Pon tu mano sobre él; /nTe acordarás de la batalla, y nunca más volverás.
Pon tu mano sobre él; Te acordarás de la batalla, y nunca más tornarás.