Por tanto, yo no refrenaré mi boca. Hablaré en la angustia de mi espíritu; me quejaré en la amargura de mi alma.
'Por lo que a mí toca, no guardaré silencio; la angustia de mi alma me lleva a hablar, la amargura en que vivo me obliga a protestar.
»En cuanto a mí, estoy tan angustiado y tan lleno de amargura que no puedo quedarme callado.
Por eso yo no he de contener mi boca, hablaré en la angustia de mi espíritu, me quejaré en la amargura de mi alma.
Por tanto, no refrenaré mi boca; /nHablaré en la angustia de mi espíritu, /nY me quejaré con la amargura de mi alma.
Por tanto yo no refrenaré mi boca; Hablaré en la angustia de mi espíritu, Y me quejaré con la amargura de mi alma.