El Jefe del Ejército de Jehovah respondió a Josué: —Quita las sandalias de tus pies, porque el lugar donde tú estás santo es. Y Josué lo hizo así.
El comandante del ejército del Señor le contestó: Quítate las sandalias de los pies, porque el lugar que pisas es sagrado. Y Josué le obedeció.
El jefe del ejército de Dios le dijo entonces a Josué: —Quítate las sandalias, porque estás pisando un lugar santo. Y Josué se descalzó.
El jefe del ejército de Yahveh respondió a Josué: «Quítate las sandalias de tus pies, porque el lugar en que estás es sagrado.» Así lo hizo Josué.
Y el Príncipe del ejército de Jehová respondió a Josué: Quita el calzado de tus pies, porque el lugar donde estás es santo. Y Josué así lo hizo.
Y el Príncipe del ejército de Jehová respondió a Josué: Quita tus zapatos de tus pies; porque el lugar donde estás es santo. Y Josué lo hizo así.