Jesús vio que Natanael venía hacia él y dijo de él: —¡He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño!
Cuando Jesús vio que Natanael se le acercaba, comentó: --Aquí tienen a un verdadero israelita, en quien no hay falsedad.
Cuando Jesús vio que Natanael se acercaba, dijo: —Aquí viene un verdadero israelita, un hombre realmente sincero.
Vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: «Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño.»
Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño.
Jesús viendo que Natanael venía hacia él, dijo de él: He aquí un verdadero israelita en el cual no hay engaño.