Entonces Simón Pedro subió y sacó a tierra la red llena de grandes pescados, 153 de ellos; y aunque eran tantos, la red no se rompió.
Simón Pedro subió a bordo y arrastró hasta la orilla la red, la cual estaba llena de pescados de buen tamaño. Eran ciento cincuenta y tres, pero a pesar de ser tantos la red no se rompió.
Simón Pedro subió a la barca y arrastró la red hasta la playa. Estaba repleta, pues tenía ciento cincuenta y tres pescados grandes. A pesar de tantos pescados, la red no se rompió.
Subió Simón Pedro y sacó la red a tierra, llena de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y, aun siendo tantos, no se rompió la red.
Subió Simón Pedro, y sacó la red a tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y aun siendo tantos, la red no se rompió.
Simón Pedro subió, y trajo la red a tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y siendo tantos, la red no se rompió.