Jesús le dijo: —Si yo quiero que él quede hasta que yo venga, ¿qué tiene esto que ver contigo? Tú, sígueme.
--Si quiero que él permanezca vivo hasta que yo vuelva, ¿a ti qué? Tú sígueme no más.
Jesús le contestó: —Si yo quiero que él viva hasta que yo regrese, ¿qué te importa a ti? Tú sígueme.
Jesús le respondió: «Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿qué te importa? Tú, sígueme.»
Jesús le dijo: Si quiero que él quede hasta que yo venga, ¿qué a ti? Sígueme tú.
Jesús le dice: Si quiero que él quede hasta que yo venga, ¿qué a ti? Tú sígueme.