Pero el que había sido sanado no sabía quién había sido, porque Jesús se había apartado, pues había mucha gente en el lugar.
El que había sido sanado no tenía idea de quién era, porque Jesús se había escabullido entre la mucha gente que había en el lugar.
Pero el hombre no sabía quién lo había sanado, porque Jesús había desaparecido entre toda la gente que estaba allí.
Pero el curado no sabía quién era, pues Jesús había desaparecido porque había mucha gente en aquel lugar.
Y el que había sido sanado no sabía quién fuese, porque Jesús se había apartado de la gente que estaba en aquel lugar.
Y el que había sido sanado no sabía quién fuese; porque Jesús se había apartado de la multitud que estaba en aquel lugar.