Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió también da testimonio de mí.
Uno de mis testigos soy yo mismo, y el Padre que me envió también da testimonio de mí.
Pues bien, yo hablo bien de mí mismo; y mi Padre, quien me envió, también habla bien de mí.
Yo soy el que doy testimonio de mí mismo y también el que me ha enviado, el Padre, da testimonio de mí.»
Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio de mí.
Yo soy el que doy testimonio de mí mismo; y el Padre que me envió da testimonio de mí.