Entonces algunos de los fariseos decían: —Este hombre no es de Dios, porque no guarda el sábado. Pero otros decían: —¿Cómo puede un hombre pecador hacer tales señales? Había una división entre ellos.
Algunos de los fariseos comentaban: 'Ese hombre no viene de parte de Dios, porque no respeta el sábado.' Otros objetaban: '¿Cómo puede un pecador hacer tales señales?' Y había desacuerdo entre ellos.
Algunos fariseos dijeron: «A ese hombre no lo ha enviado Dios, pues desobedece la ley que prohíbe trabajar en sábado.» Pero otros decían: «¿Cómo puede un pecador hacer milagros como este?» Y no se ponían de acuerdo.
Algunos fariseos decían: «Este hombre no viene de Dios, porque no guarda el sábado.» Otros decían: «Pero, ¿cómo puede un pecador realizar semejantes señales?» Y había disensión entre ellos.
Entonces algunos de los fariseos decían: Ese hombre no procede de Dios, porque no guarda el día de reposo. Otros decían: ¿Cómo puede un hombre pecador hacer estas señales? Y había disensión entre ellos.
Entonces unos de los fariseos decían: Este hombre no es de Dios, pues no guarda el sábado. Otros decían: ¿Cómo puede un hombre pecador hacer tales milagros? Y había disensión entre ellos.