Todo aquello sobre lo cual caiga algo de sus cuerpos muertos quedará inmundo. Si es horno u hornillo, será destruido. Son inmundos, y os serán inmundos.
Cualquier cosa sobre la que caiga parte de estos cadáveres quedará impura, y habrá que destruir los hornos y los fogones con los que haya entrado en contacto. Los cadáveres son impuros, y así deberán considerarlos.
Si el cadáver de alguno de ellos cae en un horno o en un fogón, estos quedarán impuros y habrá que destruirlos.
Cualquier objeto sobre el que caiga alguno de esos cadáveres quedará impuro: el horno y el doble fogón serán derribados; son impuros y los tendréis por impuros.
Todo aquello sobre que cayere algo del cadáver de ellos será inmundo; el horno u hornillos se derribarán; son inmundos, y por inmundos los tendréis.
Y todo aquello sobre que cayere algo del cuerpo muerto de ellos, será inmundo: el horno ú hornillos se derribarán; son inmundos, y por inmundos los tendréis.