Pero si el que consagró su casa la quiere rescatar, añadirá a tu valoración una quinta parte de su valor; y será suya.
Si el que consagró su casa quiere rescatarla, deberá añadir una quinta parte al valor que haya fijado el sacerdote, y la casa volverá a ser suya.
y si alguien quiere recuperar su casa, tendrá que pagar un veinte por ciento más.
Si el que consagró la casa desea rescatarla, añadirá la quinta parte al precio de su tasación, y será suya.
Mas si el que dedicó su casa deseare rescatarla, añadirá a tu valuación la quinta parte del valor de ella, y será suya.
Mas si el que santifica redimiere su casa, añadirá a tu valuación la quinta parte del dinero de ella, y será suya.