No se comerá ninguna de las ofrendas que presenten los sacerdotes; todas deberán quemarse por completo.'
Pero no se comerá ninguna víctima ofrecida por el pecado, cuya sangre haya sido introducida en la Tienda del Encuentro para hacer la expiación en el Santuario: será consumida por el fuego.
Toda ofrenda de sacerdote será enteramente quemada; no se comerá.
Y toda ofrenda de sacerdote será enteramente quemada; no se comerá.