A medida que avanzaba, la gente tendía sus mantos sobre el camino.
Jesús se dirigió a Jerusalén, y muchas personas empezaron a extender sus mantos en el camino por donde él iba a pasar.
Mientras él avanzaba, extendían sus mantos por el camino.
Y a su paso tendían sus mantos por el camino.
Y yendo él, tendían sus mantos por el camino.