Entonces ellos dijeron: —¿Qué más necesidad tenemos de testimonio? Porque nosotros mismos lo hemos oído de su boca.
--¿Para qué necesitamos más testimonios? --resolvieron--. Acabamos de oírlo de sus propios labios.
Ellos dijeron: —Ya no necesitamos más testigos. Nosotros lo hemos oído de sus propios labios.
Dijeron ellos: «¿Qué necesidad tenemos ya de testigos, pues nosotros mismos lo hemos oído de su propia boca?»
Entonces ellos dijeron: ¿Qué más testimonio necesitamos? porque nosotros mismos lo hemos oído de su boca.
Entonces ellos dijeron: ¿Qué más testimonio necesitamos? porque nosotros mismos lo hemos oído de su boca.