Producid, pues, fruto digno de arrepentimiento y no comencéis a decir dentro de vosotros mismos: 'A Abraham tenemos por padre.' Porque os digo que aun de estas piedras Dios puede levantar hijos a Abraham.
Produzcan frutos que demuestren arrepentimiento. Y no se pongan a pensar: 'Tenemos a Abraham por Padre.' Porque les digo que aun de estas piedras Dios es capaz de darle hijos a Abraham.
Muestren con su conducta que realmente han dejado de pecar. No piensen que van a salvarse sólo por ser descendientes de Abraham. Si Dios así lo quiere, hasta estas piedras las puede convertir en familiares de Abraham.
Dad, pues, frutos dignos de conversión, y no andéis diciendo en vuestro interior: “Tenemos por padre a Abraham”; porque os digo que puede Dios de estas piedras dar hijos a Abraham.
Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento, y no comencéis a decir dentro de vosotros mismos: Tenemos a Abraham por padre; porque os digo que Dios puede levantar hijos a Abraham aun de estas piedras.
Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento, y no comencéis a decir en vosotros mismos: Tenemos a Abraham por padre; porque os digo que Dios puede levantar hijos a Abraham aun de estas piedras.