Pero él negó otra vez. Poco después, los que estaban allí decían otra vez a Pedro: —Verdaderamente tú eres uno de ellos, porque eres galileo.
Él lo volvió a negar. Poco después, los que estaban allí le dijeron a Pedro: --Seguro que tú eres uno de ellos, pues eres galileo.
Pedro volvió a negarlo. Un poco más tarde, algunos de los que estaban por allí le dijeron a Pedro: —Estamos seguros de que tú eres uno de los seguidores de Jesús; tú también eres de la región de Galilea.
Pero él lo negaba de nuevo. Poco después, los que estaban allí volvieron a decir a Pedro: «Ciertamente eres de ellos pues además eres galileo.»
Pero él negó otra vez. Y poco después, los que estaban allí dijeron otra vez a Pedro: Verdaderamente tú eres de ellos; porque eres galileo, y tu manera de hablar es semejante a la de ellos.
Mas él negó otra vez. Y poco después, los que estaban allí, dijeron otra vez a Pedro: Verdaderamente tú eres de ellos, porque eres galileo, y tu habla es semejante.