Al ver Jesús la fe de ellos, le dijo al paralítico: --Hijo, tus pecados quedan perdonados.
Cuando Jesús vio la gran confianza que aquellos hombres tenían en él, le dijo al paralítico: «Amigo, te perdono tus pecados.»
Viendo Jesús la fe de ellos, dice al paralítico: «Hijo, tus pecados te son perdonados.»
Al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Hijo, tus pecados te son perdonados.
Y al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Hijo, tus pecados te son perdonados.