En otra ocasión entró en la sinagoga, y había allí un hombre que tenía la mano paralizada.
Jesús volvió a entrar en la sinagoga. Allí había un hombre que tenía una mano tullida.
Entró de nuevo en la sinagoga, y había allí un hombre que tenía la mano paralizada.
Otra vez entró Jesús en la sinagoga; y había allí un hombre que tenía seca una mano.
OTRA vez entró en la sinagoga; y había allí un hombre que tenía seca una mano.