Luego entró en una casa, y de nuevo se aglomeró tanta gente que ni siquiera podían comer él y sus discípulos.
Después de esto, Jesús regresó a la casa. Y era tanta la gente que volvió a reunirse, que ni él ni sus discípulos podían siquiera comer.
Vuelve a casa. Se aglomera otra vez la muchedumbre de modo que no podían comer.
Y se agolpó de nuevo la gente, de modo que ellos ni aun podían comer pan.
Y otra vez se agolpó la multitud, de manera que ellos ni aun podían comer pan.