pues aún no habían comprendido lo de los panes; más bien, sus corazones estaban endurecidos.
porque tenían la mente embotada y no habían comprendido lo de los panes.
Tenían la mente cerrada, pues no habían entendido el verdadero significado del milagro de los panes.
pues no habían entendido lo de los panes, sino que su mente estaba embotada.
Porque aún no habían entendido lo de los panes, por cuanto estaban endurecidos sus corazones.
Porque aún no habían entendido el milagro de los panes; por cuanto estaban endurecidos sus corazones.