Habló de esto con toda claridad. Pedro lo llevó aparte y comenzó a reprenderlo.
Como Jesús habló tan claramente de su muerte, Pedro lo llevó aparte y lo reprendió por hablar de eso.
Hablaba de esto abiertamente. Tomándole aparte, Pedro, se puso a reprenderle.
Esto les decía claramente. Entonces Pedro le tomó aparte y comenzó a reconvenirle.
Y claramente decía esta palabra. Entonces Pedro tomándole, comenzó a reprenderle.