Pero cuando los discípulos le vieron caminando sobre el mar, se turbaron diciendo: —¡Un fantasma! Y gritaron de miedo.
Cuando los discípulos lo vieron caminando sobre el agua, quedaron aterrados. --¡Es un fantasma! --gritaron de miedo.
Los discípulos lo vieron, pero no lo reconocieron. Llenos de miedo, gritaron: —¡Un fantasma! ¡Un fantasma!
Los discípulos, viéndole caminar sobre el mar, se turbaron y decían: «Es un fantasma», y de miedo se pusieron a gritar.
Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo.
Y los discípulos viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Es un fantasma! Y dieron voces de miedo.