Cuando volvió otra vez, los halló durmiendo, porque los ojos de ellos estaban cargados de sueño.
Cuando volvió, otra vez los encontró dormidos, porque se les cerraban los ojos de sueño.
Jesús regresó de nuevo a donde estaban los tres discípulos, y otra vez los encontró completamente dormidos, pues estaban muy cansados.
Volvió otra vez y los encontró dormidos, pues sus ojos estaban cargados.
Vino otra vez y los halló durmiendo, porque los ojos de ellos estaban cargados de sueño.
Y vino, y otra vez los halló durmiendo, porque los ojos de ellos estaban cargados de sueño.