Ahora bien, durante la fiesta el gobernador acostumbraba soltar un preso que la gente escogiera.
Durante la fiesta de la Pascua, el gobernador tenía la costumbre de poner en libertad a uno de los presos; el que el pueblo quisiera.
Cada Fiesta, el procurador solía conceder al pueblo la libertad de un preso, el que quisieran.
Ahora bien, en el día de la fiesta acostumbraba el gobernador soltar al pueblo un preso, el que quisiesen.
Y en el día de la fiesta el gobernador acostumbraba soltar al pueblo a un preso, el que quisiesen.