En aquel día se difundirá un refrán acerca de vosotros, y se pronunciará el lamento que dice: ‘¡Del todo hemos sido destruidos! La posesión de mi pueblo fue medida a cordel, y no hubo quien fuera sensible. Nuestro campo ha sido repartido a los que nos saquean.’'
En aquel día se les hará burla, y se les cantará este lamento: ¡Estamos perdidos! Se están repartiendo los campos de mi pueblo. ¡Cómo me los arrebatan! Nuestra tierra se la reparten los traidores. '
Cuando llegue ese día, la gente se burlará de ustedes y les cantará esta canción: “¡Se han quedado en la ruina! ¡Antes eran el pueblo de Dios, pero han cambiado de dueño! ¡Nuestros ejércitos los conquistaron y nos repartimos sus campos!”
Aquel día se proferirá sobre vosotros una sátira, se plañirá una lamentación y se dirá: «¡Estamos despojados del todo; la porción de mi pueblo se ha medido a cordel, y no hay quien restituya; a nuestros saqueadores les tocan nuestros campos!»
En aquel tiempo levantarán sobre vosotros refrán, y se hará endecha de lamentación, diciendo: Del todo fuimos destruidos; él ha cambiado la porción de mi pueblo. ¡Cómo nos quitó nuestros campos! Los dio y los repartió a otros.
En aquel tiempo se levantará sobre vosotros refrán, y se endechará endecha de lamentación, diciendo: Del todo fuimos destruidos; ha cambiado la parte de mi pueblo. ¡Cómo nos quitó nuestros campos! dio, los repartió a otros.