Otros decían: —Por causa del hambre hemos empeñado nuestras tierras, nuestras viñas y nuestras casas para comprar grano.
Otros se quejaban: 'Por conseguir trigo para no morirnos de hambre, hemos hipotecado nuestros campos, viñedos y casas.'
Otros decían que, para obtener un préstamo y así poder comprar trigo, habían tenido que hipotecar sus campos, casas y viñedos.
Había otros que decían: «Nosotros tenemos que empeñar nuestros campos, nuestras viñas y nuestras casas para conseguir grano en esta penuria.»
Y había quienes decían: Hemos empeñado nuestras tierras, nuestras viñas y nuestras casas, para comprar grano, a causa del hambre.
Y había quienes decían: Hemos empeñado nuestras tierras, y nuestras viñas, y nuestras casas, para comprar grano, por causa del hambre.