Porque yo fui el que te conoció en el desierto, en esa tierra de terrible aridez.
Yo te cuidé y te alimenté cuando andabas por el desierto; pero te llenaste de orgullo y te olvidaste de mí en cuanto calmaste tu hambre.
Yo te conocí en el desierto, en la tierra ardorosa.
Yo te conocí en el desierto, en tierra seca.
Yo te conocí en el desierto, en tierra seca.