'Sin embargo, he aquí que yo la persuadiré, la llevaré al desierto y hablaré a su corazón.
'Por eso, ahora voy a seducirla: me la llevaré al desierto y le hablaré con ternura.
»A pesar de todo eso, llevaré a Israel al desierto, y allí, con mucho cariño, haré que se vuelva a enamorar de mí.
Arrasaré su viñedo y su higuera, de los que decía: «Ellos son mi salario, que me han dado mis amantes»; en matorral los convertiré, y la bestia del campo los devorará.
Pero he aquí que yo la atraeré y la llevaré al desierto, y hablaré a su corazón.
Pero he aquí, yo la atraeré, y la llevaré al desierto, y hablaré a su corazón.