El justo aborrece la palabra de mentira, pero el impío se hace odioso y trae deshonra.
El justo aborrece la mentira; el malvado acarrea vergüenza y deshonra.
La gente honrada odia la mentira; el malvado siempre causa vergüenza y deshonra.
El justo odia la palabra mentirosa, pero el malo infama y deshonra.
/nEl justo aborrece la palabra de mentira; /nMas el impío se hace odioso e infame.
El justo aborrece la palabra de mentira: Mas el impío se hace odioso e infame.