La ira del rey es presagio de muerte, pero el sabio sabe apaciguarla.
El enojo del rey es amenaza de muerte; el que es sabio procura calmarlo.
El furor del rey es mensajero de muerte; pero el hombre sabio lo apacigua.
/nLa ira del rey es mensajero de muerte; /nMas el hombre sabio la evitará.
La ira del rey es mensajero de muerte: Mas el hombre sabio la evitará.