El que es negligente en su trabajo confraterniza con el que es destructivo.
El vago y el destructor, ¡hasta parecen hermanos!
El que es perezoso en el trabajo, es hermano del que destruye.
/nTambién el que es negligente en su trabajo /nEs hermano del hombre disipador.
También el que es negligente en su obra, es hermano del hombre disipador.