Como una ciudad cuya muralla ha sido derribada, es el hombre cuyo espíritu no tiene freno.
Como ciudad sin defensa y sin murallas es quien no sabe dominarse.
Quien no controla su carácter es como una ciudad sin protección.
Ciudad abierta y sin muralla es el hombre que no domina su ánimo.
/nComo ciudad derribada y sin muro /nEs el hombre cuyo espíritu no tiene rienda.
Como ciudad derribada y sin muro, es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda.