El que odia se esconde tras sus palabras, pero en lo íntimo alberga perfidia.
El que esconde sus rencores, en el fondo es mentiroso.
El que odia, disimula con sus labios, pero en su interior comete perfidia;
/nEl que odia disimula con sus labios; /nMas en su interior maquina engaño.
El que odia, disimula con sus labios; pero en su interior maquina engaño.