Entonces gemirás al final de tu vida, cuando tu cuerpo y tu carne se hayan consumido.
Porque al final acabarás por llorar, cuando todo tu ser[3] se haya consumido.
Cuando te hayas quedado pobre, dirás entre llantos y lamentos: «¡Pobre de mí, pobre de mí! ¡Nunca acepté ningún consejo!
no sea que gimas a la postre cuando tu cuerpo y tu carne se consuman,
/nY gimas al final, /nCuando se consuma tu carne y tu cuerpo,
Y gimas en tus postrimerías, cuando se consumiere tu carne y tu cuerpo,