No considera el camino de la vida; sus sendas son inestables, y ella no se da cuenta.
No toma ella en cuenta el camino de la vida;[1] sus sendas son torcidas, y ella no lo reconoce.[2]
A ella no le importa lo que digan de su conducta; lleva una vida sin control, pero no lo reconoce.
Por no seguir la senda de la vida, se desvía por sus vericuetos sin saberlo.
/nSus caminos son inestables; no los conocerás, /nSi no considerares el camino de vida.
Sus caminos son instables; no los conocerás, si no considerares el camino de vida.